Gracias Nora Cortiñas.

Y llegó junto a él. Se situó cara a cara. Observó en silencio sus ojos, su boca, sus manos; sintió su mirada, el gesto, su sentimiento; y entonces reconoció en él a Azucena, Berta, Haydée, María, Cándida, Delicia, Pepa… se recomoció a sí misma.

Fue así como me imaginé el momento que podría vivir una de aquellas mujeres al obserbar el retrato que tantos corazones está removiendo y tantas alegrías me está dando. Pero lo que nunca hubiera soñado esque ese momento se hiciera realidad, y nada menos que con la cofundadora e integrante del movimiento de Madres de Plaza de Mayo, Nora Cortiñas. 

Ayer por la tarde Iván me dijo que mi cuadro "había apasionado a la Madre de la Plaza de Mayo", aluciné; pero ya me subí a las nubes cuando en la interesante y conmovedora charla que dió Nora en el Palacio de la Audiencia, y tras responderme a una pergunta que le hice, me felicitó "por mi pintura extraordinaria", reconociendo que también, mediante el arte se transmite la verdadera historia, "la expresión de un rostro, la expresión de las manos, esa historia que se transmite desde el cuerpo, asi tenemos que seguir, con esa fuerza" un lujazo y tremendamente emocionante, por su puesto me fué complicado contener las lágrimas.

BESAZACOS MIL