Unas manos también se pueden retratar. Ya sabéis que más allá de que mis retratos sean lo más parecido al o a la modelo, pretendo e intento ir más allá, y que mis cuadros cuenten algo, que transmitan, que capten la esencia. Estas manos lo hacen.
Una de las cosas que más me gustan de mi trabjo es que conoces gente genial. Es el caso de Sara, que contra más la conozco, más cariño la tengo. Los cuatro encargos que me ha hecho han sido muy especiales, tanto para ella como para mí, pues han sido algo diferente, con personalidad, y con una historia tras ellos. Hacía tiempo que me dijo que le tenía que pintar algo, pero eso sí, esta vez para ella, ya que los cuadros que le había hecho hasta entonces, fueron para regalos, !"peazo" regalos! Así que cuando me enseñó la foto comprendí que se trataba de algo muy especial, y más viniendo de ella.
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| Manos dibujadas a lápiz |
El cuadro es un abrazo en toda regla; un abrazo delicado, suave, pero con una fuerza tras él impresionante. Qué lujazo poder retratar eso, la sutileza de la energía, del respeto, del cariño.
En cuanto lo terminé, le mandé un mensaje irónico a Sara diciéndole que en breve podría cambiar su foto de perfil, ya que su cuadro estaba terminado; a los 20 minutos estaba en mi casa. Sabía que se iba a emocionar al verlo, y yo, "pringada" de empatía, lo haría tras ella. En cuanto lo destapé se llevó sus manos a la cara y se le saltaron las lágrimas, creo que no hace falta que os diga sus palabras. No sabéis lo que pueden llegar a "llenar" estos momentos, no tiene precio.
Mil gracias Sara
Espero que os guste y dejéis vuestros comentarios
!BESAZACOS MIL!
